Hoy 22 de septiembre a las 14:43 tiene el equinoccio de otoño en Europa central, el evento astronómico que marca oficialmente el final del verano. Contando con el equinoccio de primavera, el de otoño es el segundo del año y tiene lugar cuando el sol se sitúa en el plano del ecuador celeste, haciendo que el día y la noche tengan la misma duración y dando comienzo al otoño. Este momento es el pistoletazo de salida que nos llevará al invierno, ya que desde el equinoccio de otoño los días pasan a ser más cortos y las noches más largas.
El equinoccio de otoño 2024 según la carta astral, by José Abizanda, CEO de Karicia Cosmética Natural
La carta astrológica de este día es muy interesante, ya que en el ascendente está Sagitario, que pide justicia, ecuanimidad y equilibrio, sin olvidar la historia. Esto nos indica que debemos estar presentes y ser dueños de nuestros actos. Ya no hay excusas, tenemos que encontrar sentido a nuestras vidas. Ya no valen tanto las cosas materiales, sino que este es un momento de transformación, de interiorización, de comprender la importancia de educar nuestra mente en la presencialidad, aceptando con sorpresa los designios del presente e implicarnos en mejorar la vida en el conjunto de toda la existencia que nos rodea. Este equinoccio de otoño es un momento para pasar a la acción siendo pulcros en nuestras obligaciones cotidianas.
Karicia: cosmética saludable
Aún cuando pareciera que este momento se presenta con cierta complejidad, por todas las cosas que ocurren en el mundo, en realidad es un momento de verdadero portal a la transformación interior, personal y colectiva. Un gran momento para incluir la meditación como acto presencial, de atención eficiente en cada acto cotidiano de nuestra vida. En esto se sustenta nuestro proyecto Karicia. Este equinoccio nos permite implementar dentro de este pequeño y ambicioso proyecto un alto concepto de belleza aunando filosofía, meditación, salud, técnica, ciencia y sobre todo sensibilidad. Las personas debemos dejar caer viejos hábitos, viejas ideas, porque todo está en constante transformación. Por esto en Karicia invitamos a subirse a este tren de conciencia, sabiduría y salud. ¿Te subes con nosotros?
4 prácticas para recibir el equinoccio de otoño
La llegada del otoño es un momento de renovación, tanto para la Tierra como los que habitamos en ella. Por esta razón, en muchas culturas el equinoccio de otoño se recibe con rituales y celebraciones, con el objetivo de conmemorar los ciclos de la vida.
Este período de renovación que llega con el otoño comporta un movimiento de energías que puede afectarnos a muchos de nosotros. En el período que va desde el final del verano a la entrada del invierno necesitamos un tiempo para que nuestro cuerpo se acomode a los cambios que esto comporta, lo que puede comportar que en esta época nos sintamos más apáticos, cansados, fatigados y con poca energía. También es normal sentir tristeza, melancolía o bloqueo mental que dificulta al concentración.
Es muy recomendable realizar en el equinoccio de otoño algunas prácticas muy sencillas que nos ayuden a recuperar la estabilidad y el equilibrio.
Meditar y anclarnos al presente
La meditación es una perfecta aliada para ayudarnos a focalizar en el presente, en el aquí y el ahora, y ser conscientes de todo lo positivo que nos rodea para aprender a visualizar nuestro entorno sin juicios ni egos. Además, también es muy útil para recargar la energía y mantener el equilibrio emocional.
Limpiar profundamente el hogar
A partir del otoño llegan los días fríos, que nos invitan a pasar más tiempo en casa y no tanto al aire libre. Esto invita a mirar en nuestro interior, pero también al refugio que. es nuestro hogar, que toca preparar para que esté en perfectas condiciones para pasar más tiempo en él. Como el otoño es un momento de renovación, es una invitación a desprenderse de todas las cosas materiales que no necesitamos y que nos lastran, aunque no seamos conscientes de ello.
Contacto con la naturaleza
Si bien todas las estaciones del año tienen sus virtudes, hay que admitir que los colores en la naturaleza tienen un no sé qué especial. Ese momento en que los bosques se tiñen de ocres, naranjas y rojizos es una genial invitación a pasear por la naturaleza, caminar con los pies descalzos por las hojas recién caídas y a sentir que formamos parte de la Tierra.
Reflexiona sobre tus metas y objetivos
Tradicionalmente, en el equinoccio de otoño se daba gracias a la Tierra por las cosechas que se plantaban en primavera y daban sus frutos. Tomando esta idea, es un momento genial para evaluar tus propias “cosechas” personales y ver si tus metas y propósitos de los últimos seis meses se han cumplido o se han desarrollado. Es un buen momento para tomar papel y boli y reflexionar sobre si lo plantado en tu vida personal ha dado los frutos que deseabas.
Adapta tu rutina facial al otoño
La llegada del otoño también es el momento ideal para renovar tu piel después del verano y adaptar tu rutina facial al invierno. Después de la época estival, en la que hemos pasado más tiempo al aire libre, uno de los objetivos en tu rutina facial es unificar el tono para recuperar la luz de la piel y evitar las temidas manchas en la piel.
Para ello, es muy recomendable introducir en tu rutina la Pruina limpiadora Brezo y la Crema hidratante iluminante Brezo, ambas ricas en activos vegetales con alto contenido en vitamina C y arbutina que recuperan la luz natural de la piel pero también inhiben la producción de melanina, lo que previene la aparición de manchas solares tras el verano.
Pero sobre todo, para renovar la piel es imprescindible exfoliarla entre 1 y 2 veces a la semana con el Peeling Bambú y Cacao, un exfoliante súper suave, apto para todo tipo de piel y rico en Silicio. Permite eliminar muy suavemente las células muertas acumuladas en la superficie de la piel, evitar el engrosamiento y las imperfecciones, así como recuperar una piel más suave, luminosa y homogénea.
Por último, con la llegada del otoño también es fundamental recuperar la función barrera, la capa interna de la piel que nos protege del exterior, de los efectos externos como el sol, pero también evitando la pérdida de agua transepidérmica, que asegura la correcta hidratación de la piel.
Para mantener una piel correctamente hidratada y protegida, es fundamental proteger la función barrera, formada de manera esencial por componentes grasos, como las ceramidas, así como moléculas solubles en agua. De esta manera, cuanto más nutrida esté la barrera protectora más capaz será de retener el agua y menos deshidratada estará la piel. Para ello, es fundamental que en tu rutina de belleza de otoño también incluyas el Sérum regenerante Pasiflora, un cóctel de aceites vegetales y extractos de plantas que aporta los lípidos que la piel necesita, aumentando el cemento celular de la epidermis y estimulando la producción de colágeno y elastina, dos proteínas claves para mantener una piel sana, firme y sin arrugas.
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