La cosmética silenciosa es una de las revoluciones en cosmética que nos llega este 2023, que aboga por apostar por una rutina de cuidado facial con productos con activos respetuosos que recuperen y restablezcan la salud de la piel apagada.
Las situaciones de estrés y alteración social que hemos vivido durante los últimos años han aumentado algunos problemas en las personas: como las situaciones de ansiedad, los problemas mentales y también la hipersensibilidad cutánea. Y es que, nuestra piel es el espejo de nuestras emociones. El aumento del estrés puede alterar la piel, pero también pueden hacerlo otras causas, como los cambios hormonales.
Sin embargo, esta alteración de la piel también se puede presentar por el uso de productos de belleza muy intensivos durante largos plazos de tiempo, debido que, en los últimos años se ha popularizado el uso constante de activos de alta potencia en las rutinas cosméticas. Una práctica que no todas las pieles toleran o no dejan pasar el tiempo prudencial para que dermis se acostumbre al uso de estos activos.
Esto comporta que la piel se altere, presentando problemas cutáneos, como la piel apagada, la falta de tono, el exceso de grasa, la descamación y hasta procesos de alergia cutánea y dermatitis atópica.
La cosmética silenciosa: la solución a la piel alterada
Para recuperar la piel y restablecer su salud, la cosmética silenciosa propone el uso de productos con fórmulas respetuosas y equilibradas, lo más similar posible a la estructura de la barrera natural de hidratación de la piel.
Al empezar una rutina de cuidado facial con cosméticos silenciosos, la piel recupera los nutrientes, vitaminas y la hidratación perdida, recuperando su salud y, por consiguiente, también su belleza. A diferencia de los productos con activos súper potentes, la cosmética silenciosa trabaja poco a poco, sin prisas. Sus resultados no son inmediatos o en pocos días, sino que se ven como pronto a los tres meses de uso.
¿Qué diferencia a la cosmética silenciosa de la tradicional?
Los productos que aportan un efecto inmediato en la piel suelen tener una alta concentración de activos de acción muy potente, como los alfa o betahidroxiácidos o los retinoides. Estos activos pueden provocar irritación en el rostro y es necesario introducirlos poco a poco en la rutina de cuidado facial, para que la piel se acostumbre a ello. Y aún así, existen muchas pieles que nunca llegan a tolerarlos del todo, como las sensibles o muy sensibles.
Esto no significa que todas las pieles tengan que renunciar a los cosméticos con activos muy potentes, sino que lo ideal es que su uso se regule y, eso sí, la salud de la piel se mantenga con una cosmética con una formulación más respetuosa.
La cosmética silenciosa con Karicia
Todos los productos Karicia están formulados con una premisa básica: la salud de la piel, más allá de la belleza. Por eso, trabajan poco a poco, recuperando la oxigenación de las células y restableciendo el equilibrio del factor natural de hidratación de tu piel.
El Sérum regenerante Pasiflora es la representación Karicia de la cosmética silenciosa. Con el paso de los días, la piel cambia. El efecto ‘buena cara’ se vuelve permanente en el rostro, debido a que este potente cóctel de activos vegetales consigue restablecer el equilibrio total de la piel. Mejora la hidratación, la nutrición, la elasticidad y firmeza del rostro; aporta ácidos grasos esenciales como el Omegas 3, 6 y 9 para reforzar la función barrera de la piel así como mejorar la producción de colágeno, recuperar el tono de la piel e iluminarla.
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